La Vida de Bernardita

Antes de las apariciones de Nuestra Señora, Lourdes era solo un pueblecito más de los Pirineos, con 4,135 habitantes. Eclipsado por su Fortificación, Lourdes era el centro administrativo del Distrito. Al oriente, las aguas del río Lapaca suministraban energía a cinco molinos. Fue en el Molino Boly, en Julio de 1841, donde los eventos tuvieron un giro dramático. El molinero Justin Castérot murió, dejando a su viuda Clara sola, con cuatro niñas y un pequeño varón. Se necesitaba un hombre para manejar el negocio. Francisco Subirous, un empleado de un molino vecino, fue invitado a cortejar la hija mayor, Bernarda. Francisco, sin embargo, se enamoró de la menor, Luisa. Se casaron en Enero 9 de 1843, y la joven pareja se instaló molino Castérot.

El 7 de Enero de 1844, Luisa dio a luz a María-Bernarda, quien pronto fue conocida como Bernardita. La bebé fue bautizada dos días después en la iglesia de la parroquia. Pero, en Noviembre, Luisa se quemó el pecho con una vela, y no pudiendo amamantar más a su bebé, se la entregó a Bernardita a María Laguës, una nodriza, por espacio de dieciocho meses.

En 1846, la familia celebró el nacimiento de Antonita. Dos años más tarde, Clara Castérot dejó el molino y se fue a vivir con su hija mayor, dejando a Francisco trabajando solo en el molino. Siendo muy poco versado en el manejo de los negocios, pronto Francisco se endeudó. En Junio de 1854, incapaces de pagar las deudas del molino, los Subiruous fueron forzados a abandonar el molino. En 1855, un brote de cólera mató a treinta y dos víctimas y dejó a Bernardita con asma crónica. Clara Castérot murió; y, haciendo uso de la pequeña herencia que ella dejó, los Subirous se mudaron del Molino Baudéan y alquilaron otro en mejores condiciones en Arcizac. Pero, las cosechas en ese año y el siguiente fueron malas y Lourdes fue golpeada por la hambruna. Arruinados, y ahora con dos hijos más que alimentar, la familia se trasteó a una “casucha miserable” en Rives House.

Francisco se convirtió en jornalero; Luisa desempeñó los oficios varios que pudo conseguir; los hijos mayores colectaban huesos y retal de hierro; y, Bernardita se mudó a la posada de su tía. Incapaz de pagar la renta, desalojada y sin vivienda, la familia se mudó al ‘Calabozo’. En Marzo 27 de 1857 Francisco fue arrestado por robar ‘harina’. Aunque fue declarado inocente, y liberado una semana después, no pudo encontrar trabajo. En septiembre, para tener ‘una boca menos que alimentar’, Bernardita se fue a trabajar adonde su vieja nodriza, en Bartrés. Pero, se enfermó, y la vida allá era muy difícil; así que sus padres decidieron que ella debería retornar a Lourdes. En Enero 21 de 1858, Bernardita regresó a su casa de ‘El Calabozo’ y comenzó a asistir a la clase de indigentes en la escuela del convento de Nevers

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